viernes, 29 de noviembre de 2013

THOR: EL MUNDO OSCURO

Lo primero, hay que partir de la base de que es la continuación no ya de la primera de Thor, sino también de "Los Vengadores". Si os gustaron por tanto las anteriores, malo será que no os guste esta.

A mí me encantan todas las películas de superhéroes, y esta no iba a ser menos. No se hace nada pesada, a pesar de que dura bastante, y sigue la línea de las producciones de la Marvel, con su buena dosis de acción y efectos especiales y su pequeño toque de humor. También tenemos el romanticismo que viene de la mano de ese amor aparentemente imposible entre Thor y la humana esa que ni recuerdo el nombre. ¿A quién le importa? Ella nunca estará a la altura de ese dios que parece cincelado a mano por el mismísimo Miguel Ángel. Y, encima, siempre metiéndose en líos. Si es que cuánto mejor sería tener un Thor soltero y sin compromiso, de verdad.

Luego está el malo de la saga... se me ha ido el nombre... ¿Loki? Bueno, el hermano feo, ya sabéis. Digoooo, el hermano malo. Aquí se le saca el lado tierno momentáneamente.

El caso es que te encuentras enganchado a la historia, y si algo parece previsible en el fondo te da igual. Además, esas pequeñas gotitas de humor absurdo se agradecen y hacen de pegamento buenísimo en la trama.

Tiene todos los ingredientes para que pases un buen rato. Siempre que te guste la ciencia-ficción y todo eso de los superhéroes y mundos extraños, claro, que para gustos, los colores.

En definitiva, guiaros por las anteriores películas para saber si os gustará, porque viene a ser el mismo estilo con una historia un poquito diferente, sólo. Y si no las habéis visto, pues supongo que os perderéis un poco con algunas cosas, pero eso no quita que no podáis verla y entenderla perfectamente, así que tampoco es excusa para no ir.

Nota: notable bajo.

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